Principios del periodismo: vigentes con o sin Twitter

Las tecnologías disruptivas en la sala de redacción plantean nuevas rutinas periodísticas para dialogar con las audiencias.

Sin embargo, el periodismo sigue siendo el mismo, con todo y sus principios*:

  1. su primera obligación es con la verdad
  2. su primera lealtad es con el ciudadano
  3. su esencia es la disciplina de VERIFICAR
  4. quienes lo ejerzan deben mantener la independencia de aquellos sobre los que reporta
  5. debe ejercer un control independiente del poder
  6. debe servir como foro público para la crítica y el comentario
  7. debe esforzarse porque su significado sea interesante y relevante
  8. debe procurar que las noticias sean comprensibles y dimensionarlas
  9. quienes lo ejerzan tienen la obligación de practicarlo bajo su propia conciencia
  10. los ciudadanos también tienen derechos y responsabilidades respecto a las noticias.

Así es que con cualquier servicio de la web 2.0, sea Twitter u otro, los fundamentos del periodismo siguen más vigentes que nunca. Hoy una de esas plataformas más usadas para que fluya la información es Twitter, mañana puede desaparecer y aparecer otra. Una tecnología es útil mientras la usamos y lo que importa no es el artefacto o servicio tecnológico sino para qué nos sirve.

En el caso de Twitter al servicio del periodismo, el periodista cuenta con un capital social qué ganar con la participación en este servicio de microblog, como conocer su audiencia e interactuar con ella no solo para conocer sus reacciones sino para obtener retroalimentación: consejos, críticas, aportes, nuevos datos y aristas para que el periodista siga profundizando en la historia.

Así mismo, aprovechar el contenido generado por el usuario (UGC), por ejemplo, fotos y videos de primera mano en el lugar de los hechos en donde el ciudadano, y no el periodista, está presente y registrando en tiempo real con sus dispositivos como celulares inteligentes. Claro que los periodistas también pueden valerse de estos dispositivos en su labor informativa para informar en tiempo real lo que está sucediendo.

Estas tecnologías disruptivas ayudan a enriquecer las historias en lo que respecta a la instantaneidad y multimedialidad que permite la web y la ubicuidad para cubrir, publicar y consumir contenidos.

¿Twitter afecta la lectura del periodismo?

Nicholas Carr, en su libro Superficiales. ¿Qué está haciendo internet con nuestras mentes?, se cuestiona si con internet estamos sacrificando la capacidad para leer y pensar en profundidad, así como las consecuencias intelectuales y culturales de la Red, la cual dice él nos está reconfigurando a su propia imagen, volviéndonos más hábiles para manejar y ojear superficialmente la información, pero menos capaces de concentrarnos, de contemplar y de reflexionar.

Ante esto, ¿qué puede hacer el periodista? Puede aportar valor al aprovechar las cualidades del ciberperiodismo: hipertextualidad, multimedialidad e interactividad. Es decir, poner estas cualidades al servicio de la producción de contenidos profundos que trasciendan los meros 140 caracteres de Twitter. Al fin y al cabo esta plataforma además de permitir la conversación, permite compartir contenidos y sus respectivos enlaces al sitio web donde estén alojados.

Bibliografía:

Carr, N. (2011). Superficiales. ¿Qué está haciendo internet con nuestras mentes? Bogotá: Taurus, 340.

*Kovach, B; Rosenstiel, T. (2007). The Elements of Journalism. What People Should Know and the Public Should Expect. Completely Update and Revised. New York: Three Rivers Press, 268.